Las
lámparas son elementos esenciales en
nuestros hogares ya que nos proporcionan la luz necesaria cuando carecemos de
luz natural. Sin embargo, a la hora de comprarlas deberemos tener en cuenta
tanto la zona que queremos iluminar como el ambiente que queremos conseguir.
Esto significa que no elegiremos la misma lámpara para el dormitorio que para
el salón o para la cocina. Lo mismo ocurre a la hora de iluminar la mesa de
estudio o de trabajo frente a la mesita de noche. En este caso, cada zona
tendrá que tener su propia lámpara para ofrecernos la luz adecuada. Precisamente,
cuando hablamos de mesas entrarán en juego dos tipos de lámparas: los flexos y las lámparas de sobremesa.
Cada una nos ofrece una calidad y cantidad lumínica diferente. En Lámparas
Lidia os vamos a contar sus características para que acertéis a la hora
tanto de comprarlas como de iluminar el hogar o la zona de trabajo y estudio.
Lámparas de sobremesa
Las
lámparas de sobremesa
son aquellas iluminarias que normalmente situamos en las mesitas de noche, en
las cómodas o en las estanterías ya que nos ofrecen una iluminación ambiental.
Esto significa que nos proporcionarán
una luz suave, pero suficiente para evitar que nuestra vivienda está
completamente a oscuras cuando vemos la televisión, cuando llegamos a casa de
madrugada o cuando nos levantamos tanto por la noche como por la mañana. Además
de ofrecer una iluminación cálida y tenue, las lámparas de sobremesa tienen un gran poder decorativo. Actualmente,
podemos encontrar una amplia variedad de diseños desde los más clásicos hasta
los más modernos de forma que podremos encontrar el modelo que mejor se adapta
a nuestro hogar. La característica y el punto de diferencia de las lámparas de
sobremesa lo podrá el tipo de pantalla que tiene.
Flexos
Los
flexos son los fieles
compañeros de las mesas de estudio e incluso de las mesitas de noche. Es la
lámpara perfecta para estudiar, trabajar
o hacer los deberes ya que nos ofrecerá calidad y cantidad lumínica para
poder realizar nuestras actividades correctamente y sin dañar nuestra salud
ocular. Una de las características fundamentales de los flexos es su tallo
flexible lo que significa que podremos
enfocar el punto de lectura directamente.
A la hora de comprar online tu flexo, podrás encontrarte dos modelos. Por un
lado, el flexo de sobremesa que es
el más popular. Tiene un pie pesado para evitar que la lámpara se caía por el
peso de la pantalla. Asimismo, tiene un brazo articulado lo suficientemente
largo para llegar al centro del escritorio. Por otro lado, están los flexos de pinza ideales para escritorios
o mesitas de noche pequeñas. Una de sus características es que son portátiles
por lo que podremos cambiarlos de sitio según nuestras necesidades. Tan solo se
deberá tener una base para enganchar la pinza.