lunes, 22 de abril de 2019

Lámpara de pie o de sobremesa ¿cuál elegir?



Las lámparas forman una parte esencial en nuestra vida. Son imprescindibles tanto en el hogar como en oficinas, empresas, comercios, fábricas e incluso en la calle. Gracias a ellas podremos seguir con nuestras actividades cuando se oculte el sol. Además, nos proporcionan seguridad y confort. Centrándonos en la iluminación de nuestra casa o de los lugares de trabajo o estudio, desde Lámparas Lidia te recomendamos invertir en un proyecto de iluminación. De esta manera conseguirás que tu espacio esté correctamente iluminado, estará ajustado a tus necesidades y a las actividades que desempeñas en cada uno de los espacios.

Más allá de la iluminación general, también debemos apostar por la iluminación puntual o focalizada. Esto lo conseguiremos a través de las lámparas de pie y las lámparas de sobremesa. Este tipo de lámparas nos ofrecerá una luz específica muy necesaria en algunas tareas como, por ejemplo, a la hora de ver la televisión, a la hora de estudiar o a la hora de coser, entre otras. Emitirán luz en un punto concreto, lo que contribuirá a que veamos mejor sin necesidad de forzar la vida. Por tanto, se contribuirá a cuidar nuestra salud ocular.

A continuación, os vamos a explicar cómo sacar el máximo partido a ambas lámparas. Habrá espacios donde podrás combinarlas y en otros donde podrás optar por poner una u otra.

Instalación lámparas de pie y de sobremesa


  • Zona de trabajo o de estudio. Cuando trabajamos o estudiamos, necesitamos una buena iluminación. Durante el día se podrá contar con la luz natural. En caso de no disponer de esta luz, deberás tener una luz general emitida por una lámpara de techo y una luz puntual a través o bien de una lámpara de pie o de una lámpara de sobremesa. Lo ideal es escoger un flexo para instalar en el escritorio. Nos proporcionará la luz perfecta para trabajar o estudiar cómodamente.
  • Zona de lectura o junto al sofá. En esta ocasión, las lámparas de pie son mejores que las de sobremesa básicamente porque en esas zonas no tenemos una mesa donde colocar una lámpara. Son perfectas para leer, para coser, para ver la televisión o para dejar la luz encendida cuando no estamos en casa. Si quieres una mayor precisión lumínica, opta por aquellas que tienen los brazos flexibles, así podrás acercar o alejar el foco de luz según tu necesidad.
  • Mesilla de noche. Es un clásico tener instalada una lámpara de sobremesa en la mesita de noche. Nos proporcionará una luz auxiliar ideal para no molestar si nos tenemos que levantar en mitad de la noche o a primera hora de la mañana.
  • Entrada. Nunca está demás complementar la luz de techo de la entrada con una lámpara de sobremesa o de pie. En esta ocasión, puedes optar por las dos opciones. Todo dependerá del espacio que tengas y de cuál te guste más.


En Lámparas Lidia tenemos un amplio catálogo de lámparas de pie y de sobremesa perfectas para tu hogar o para tu oficina o empresa. Echa un vistazo a todos los modelos que tenemos. Y si necesitas ayuda, no lo dudes y consúltanos.